España y Rumanía, aunque son dos países situados en ambos extremos de Europa desde un punto de vista geográfico, han tenido, a lo largo de la historia, numerosas conexiones. Los dos países comparten el mercado único de la UE como socios, han desarrollado multitud de proyectos de promoción mutua, realizan comercio e inversión, ofrecen nuevas oportunidades de empleo a sus ciudadanos y, al mismo tiempo, dan la bienvenida con los brazos abiertos a los turistas que cruzan Europa para visitar otro rincón del mundo, diferente, único.